lunes, 30 de septiembre de 2019

¿Quiénes son las Coccinelle en Ecuador?

Nadie parece saber que la libertad de los jóvenes gay de hoy es el producto de la lucha de los antiguos como yo

Alberto Cabral (Purita Pelayo)
Los fantasmas se cabrearon[1]

Colectivo "Nueva Coccinelle" PH: Vianney Hidalgo

En Ecuador, la homosexualidad era un delito hasta 1997. El Código Penal de la época en su artículo 516 inciso primero decía lo siguiente:

            “En los casos de homosexualismo, que no constituyan violación, los dos correos serán      reprimidos con reclusión mayor de cuatro a ocho años”. 

Durante los años previos a la despenalización, quienes sufrían de forma más cruenta la represión de las autoridades, eran los cuerpos visiblemente diversos, las mujeres trans. 




Compañera trans asesinada. Presenta signos de tortura y violencia extrema.PH: Purita Pelayo (Alberto Cabral)

 La situación se agravó en los años 80, con un gobierno de corte conservador y cristiano lo que entonces era un “delito”, se convirtió en una persecusión y cacería, por todos los periódicos del país aparecían titulares hablando de los muertes (no de los asesinatos) de hombres vestidos de mujeres, de Juan “alias María”, de Pedro “alias La Negra”, de Jacinto “alias Verónica”.

Muchas de ellas, las que no aparecían en los titulares simplemente desaparecían en el anonimato, por los pocos nexos familiares, las únicas que acompañaban en sus velorios, eran sus compañeras de calle y de lucha. 



 A quienes no las mataban pasaban de siete días de la semana, cuatro en el CDP (centro de detención provisional) tratando de salir lo más pronto pagando a tramitadores que se llevaban lo poco que tenían. 
Compañeras trans en el Centro de Detención Provisional. PH: Purita Pelayo (Alberto Cabral)

Cansadas de esta situación durante varios días en marchas pacíficas acudió a la Plaza Grande un grupo de mujeres trans llamadas “Coccinelle”, lo que en una ciudad como Quito, resultaba chocante, alarmante y peligroso. Allí estaban a la luz del día, esos “hombres vestidos de mujeres” que eran dueñas de la calle solo por las noches, esos personajes que la ciudad entera sabía que existían pero que prefería ignorar. En este contexto y apoyadas por otros colectivos y en un contexto de detención de 100 personas trans en Cuenca, a través de sentencia de Corte Constitucional, se logró que despenalizaran la homosexualidad.


La Asociación Coccinelle, tomó su nombre en honor a la famosa transexual francesa que visitó Guayaquil en los años sesenta. Coccinelle fue actriz, vedette y cantante y fue la primera persona famosa en tener una vaginoplastia.


En 1997, la Asociación obtuvo su personería jurídica y años más tarde cambió el nombre a FEMIS (Fundación ecuatoriana de Minorías Sexuales) y actualmente son " Nueva Coccinelle".

En mayo de 2019, presentaron una demanda al estado Ecuatoriano exigiendo se las reconozca como víctimas de crímenes de lesa humanidad por todas las torturas, detenciones ilegales, desapariciones, malos tratos y demás que vivieron antes, durante y despúes de 1997. El gobierno de 1984-1988 fue uno de los más cruentos del Ecuador,  según el Informe de la Comisión de la Verdad del año 2010, entre 1984 al 2008 existieron 831 violaciones de derechos humanos que afectaron a 456 víctimas, la mitad de todos los delitos se cometieron en ese gobierno , sin embargo ninguna de estas mujeres trans, constan en él.
 
Nueva Coccinelle. PH: Vianney Hidalgo

Conforme a conversaciones con una de sus liderezas y actual vocera Purita Pelayo, en los años 90s el colectivo estaba compuesto por 50 personas aproximadamente, de todas esas luchadoras, sobreviven entre 10-12. Las “Nueva Coccinelle” han despertado y han vuelto a la lucha para que un estado represor les devuelva de alguna forma lo que les arrebató durante tanto tiempo. 





Para saber más de ellas: 

Facebook: Nueva Coccinelle

Para comprar su libro:  Puedes comunicarte con este blog o a cualquiera de las redes sociales. Se hacen envíos a nivel nacional e internacional. Los libros vienen con dedicatoria de la autora.



 
Portada del libro  "Los fantasmas se cabrearon"






[1] Los Fantasmas se cabrearon. Es un libro escrito por Alberto Cabral (Purita Pelayo) lidereza y vocera de las “ Nueva Coccinelle”. El libro trata sobre las crónicas de la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador.

miércoles, 25 de septiembre de 2019

Encontro das aguas



El encuentro de las aguas es un fenómeno geográfico del Estado de Amazonas en Brasil, cercano a Manaus (su capital). 
 
Manaus


El Río Negro con el Solimoes (nombre originario del Amazonas en Brasil) avanzan paralelos por 6 kms sin mezclarse, tienen  diferente densidad, temperatura y velocidad. El uno es de aguas negras (he ahí su nombre) y el otro de aguas cafés arcillosas, en algunas partes del trayecto parece que el uno gana al otro, sin embargo se resisten a ser uno solo.
Encontro das aguas 2019


Mientras me envolvía con la magia de navegar en el río más caudaloso y largo del mundo pensé que muchas veces en la vida avanzamos como el Solimoes y el Negro.


Hay encuentros inevitables y las ganas de fundirse son infinitas, pero hay tantas incompatibilidades que aunque te obligues a avanzar kilómetros y kilómetros esperando que en algún momento puedan ser uno solo,  no pasa y te encuentras con un Amazonas que no da tregua porque es lo que es, porque ha vivido recorriendo, erosionando y sembrando desde que nace en los Andes, y entonces ( con ese afán que se compara a la terquedad)  aceptas ser el otro río, el que corre más lento, el que a veces entre orilla y orilla se cuela y le da un beso y por un momento parecen ser uno, pero metros más abajo vuelven a separarse, y entonces el Amazonas vuelve a  bramar y el Río Negro a alejarse, se acompañan, convergen pero nunca se mezclan.




Entre kilómetro y kilómetro te das cuenta que el encuentro es maravilloso pero que en esa parte de la Selva no se mezclarán, sin embargo "ríos" abajo aparecen nuevas aguas, blancas, rápidas que vienen de otras montañas, de otras latitudes, aparece un río que canta diferente y entonces es ahí cuando formarán el bajo Amazonas, que mucho, mucho más abajo pasará a ser parte del maravilloso Atlántico.

Llegando al Atlántico


Y ahí, lejos de casa, a más de 35 grados de temperatura, mientras pensaba en mi simple analogía, entendí las veces que he sido el Amazonas, las veces que he sido el Río Negro, entendí mi momento en la selva y continué mi camino agradecida con el universo y con la vida. Con 5 días más de navegar río abajo sentí la “saudade” pero también la alegría del encuentro y sí, fui feliz.


 En alguna parte del Amazonas, agosto/septiembre 2019.